Hay pocos objetos que nos acompañen a lo largo de nuestra vida, que la mayoría de ellos se rompen, se desportillan, se averían y acaban en el estercolero, aunque ahora se reciclan algunos pocos.
Que decir de la ropa, que se descose o se deshilacha, se ve que los tejidos ya no son como antes.
Los coches se desvencijan y se vuelven chatarra, chatarra carísima.
Las casas, si duran mucho, que yo las hago también, aunque hay que parchearlas de vez en cuando, sobre todo el agua las arruina.
Los muebles heredados suelen durar bastante, aunque se pasaron de moda y no son muy útiles, pero no me refería yo a este tipo de objetos.
Pensaba en unos prismáticos, antes se decía gemelos y mas antiguamente binoculares.
He aquí que yo tengo unos antiquísimos, muy buenos, sus cristales permanecen transparentes y luminosos.
Creía yo de crío que serian suizos o alemanes, que aquí esas cosas no se fabricaban.
Tras mucho insistir me los dejaban, solo un poco.....niño cuélgatelos no sea que se te caigan....la fascinación de ver de cerca las cosas, magia pura.
Recuerdo que mirar al revés era todavía mas sorprendente si cabe, todo se ve pequeño y alejado.
Son estos de que hablo hoy, negros, pesados, que antes las cosas no se hacían de plástico, con su fina correa de cuero que permanece flexible e impoluta, que el cuero era mucho cuero entonces y se curtía con esmero.
No recuerdo como, dieron a parar en mi estudio, donde están hace años en su funda marrón también de cuero, a veces, cuando al ir a trabajar veo un buitre o un águila, me apresuro a enfocarlos, también miro las ramas de los alcornoques que se acercan a mi rostro, ahora ya cargadas de bellotas.
Hoy en día es fácil hacer pesquisas y he averiguado, que son españoles y del ramo de guerra, se ve que mi padre los consiguió de algún pariente del ejercito, que hubo varios.
Todo esto, lo se, no tiene ningún interés o actualidad, solo pensaba en el verso de Machado, cuando vio una rama verde en un olmo centenario.
Desde hoy mis prismáticos tienen su historia y su pequeño rincón en el mundo, con sus lentes ajustables, para ver lo que esta lejos cerca, para ver lo que esta cerca, lejos.
Son objetos que van durando, en buen estado y funcionando, me hizo anotarlo en mi cartera, como a Machado
Que decir de la ropa, que se descose o se deshilacha, se ve que los tejidos ya no son como antes.
Los coches se desvencijan y se vuelven chatarra, chatarra carísima.
Las casas, si duran mucho, que yo las hago también, aunque hay que parchearlas de vez en cuando, sobre todo el agua las arruina.
Los muebles heredados suelen durar bastante, aunque se pasaron de moda y no son muy útiles, pero no me refería yo a este tipo de objetos.
Pensaba en unos prismáticos, antes se decía gemelos y mas antiguamente binoculares.
He aquí que yo tengo unos antiquísimos, muy buenos, sus cristales permanecen transparentes y luminosos.
Creía yo de crío que serian suizos o alemanes, que aquí esas cosas no se fabricaban.
Tras mucho insistir me los dejaban, solo un poco.....niño cuélgatelos no sea que se te caigan....la fascinación de ver de cerca las cosas, magia pura.
Recuerdo que mirar al revés era todavía mas sorprendente si cabe, todo se ve pequeño y alejado.
Son estos de que hablo hoy, negros, pesados, que antes las cosas no se hacían de plástico, con su fina correa de cuero que permanece flexible e impoluta, que el cuero era mucho cuero entonces y se curtía con esmero.
No recuerdo como, dieron a parar en mi estudio, donde están hace años en su funda marrón también de cuero, a veces, cuando al ir a trabajar veo un buitre o un águila, me apresuro a enfocarlos, también miro las ramas de los alcornoques que se acercan a mi rostro, ahora ya cargadas de bellotas.
Hoy en día es fácil hacer pesquisas y he averiguado, que son españoles y del ramo de guerra, se ve que mi padre los consiguió de algún pariente del ejercito, que hubo varios.
Todo esto, lo se, no tiene ningún interés o actualidad, solo pensaba en el verso de Machado, cuando vio una rama verde en un olmo centenario.
Desde hoy mis prismáticos tienen su historia y su pequeño rincón en el mundo, con sus lentes ajustables, para ver lo que esta lejos cerca, para ver lo que esta cerca, lejos.
Son objetos que van durando, en buen estado y funcionando, me hizo anotarlo en mi cartera, como a Machado