Hoy es un día de rememoración de aquel 23 de febrero del 81, ademas he estado tomando un café junto a Las Cortes, en la Carrera de San Jeronimo.
Estuve aquella jornada a partir de las ocho de la tarde, brujuleando por Madrid en moto, lo que me permitió pasar un par de veces por Neptuno y mirar el panorama de la policía nacional rodeando el Congreso con los civiles ya dentro.
Adelanté un par de autobuses con militares por la Castellana, no recuerdo si eran los del comandante Pardo Zancada que fue al Congreso ya iniciado el jaleo.
En una emisora de radio que existía en Ayala esquina Claudio Coello, se estaciono un jeep con policía militar, con sus cascos blancos.....yo no era consciente de la trascendencia del suceso solo participaba de lo extraordinario e inusual de la situación.
Inquietud no sentí en ningún momento, la ciudad a las diez de la noche se quedo desierta, acudí a la cita previa con un amigo con el que iba a planear un viaje .
Cenamos solos en un figón, los camareros estaban recelosos, éramos los dos únicos comensales.
Tras la cena, copa y mas vueltas en moto por Madrid, El Palace muy iluminado y con mucha gente a la puerta, siendo ya imposible acercarse a curiosear por los alrededores.
Ya muy tarde, hacia las cuatro y en vista del frío, se circulaba sin casco, decidí encaminarme a casa en el barrio de los Austrias, al cruzar Cibeles vi algo que fue la imagen de la noche que quedo en mi memoria, un grupo de mas de cien personas, jóvenes en su mayoría, con una grandísima bandera española bajaban Alcala por la acera del Banco de España, gritando a coro “Tejero mátalos”.
Para cuando paré acercandome a ver de que iba aquello ya circulaban por Recoletos camino de Neptuno con el contundente soniquete, pronto unos coches de policía les cortaron el paso y se entabló un dialogo muy típico en el que uno de los policías resulto ser del pueblo de uno de los manifestantes y se rebajó la tensión.
Nunca supe quien era aquella gente, nunca leí nada sobre ellos y supongo que pocas personas presenciaron lo que narro ahora.
En la cama pensé que había presenciado uno de esos momentos como de Los Episodios Nacionales, este pueblo es muy de revueltas y cuartelazos, todo me pareció habitual y me dormí, cansado.
Que bonito! Este me gusto mucho escribe mas de este tipo y dejate de quejar!
ResponderEliminarun beso
margarita